El valor de una firma

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Real e impactante,me ha sobrecogido el corazón este vídeo de amnistia internacional

Benizar, ya queda menos

Rincón de las cuevas
Panorámica de Benizar nevado desde el Castillo


Panorámica de Benizar con su Castillo
Como me gustaría pasar estas Navidades viendo en persona estas panorámicas, delante la chimenea, con unos chorizicos en la lumbre y un buen vaso de vino, y como no con mi familia a mi lado, si este año no veo la nieve bueno que le vamos hacer, siempre habrá los chorizicos,el vino y mi familia para festejar esta Navidad, y a vosotros que estáis viendo estas imagenes, con nieve o sin nieve, a soñar...........................................jajajajajaj!!!! Feliz Navidad.

A MIS AMIGOS DE LA COFRADIA

martes, 2 de diciembre de 2008


ESA JUNTA!!! ESA JUNTA!!! LA JUNTA DIRECTIVA DE LA COFRADIA DE LA SOLEDAT "EL VICEPRESIDENTE, LA TESORERA Y EL SECRE....." OS DESEAN FELICES FIESTAS.

CANCION DE NAVIDAD

lunes, 1 de diciembre de 2008

Y PARA AQUELLOS QUE EL PRIMER VIDEO LES HA PARECIDO ALGO FRIKY....
OS DEJO UN VILLANCICO A MEDIDA CON EL BLOG " OS DESEO A TODOS ,DE TODO CORAZON , UNA FELIZ NAVIDAD Y UN PROSPERO AÑO 2009"

FELIZ NAVIDAD

Nos Estamos Haciendo Mayores...

jueves, 27 de noviembre de 2008

La mayoría de la gente que acaba de entrar en la Universidad nació en 1990. A esa edad yo ya sabía sumar, restar y muchas cosas mas. Esta gente no tiene recuerdos significativos de Felipe González con cazadora de pana, incluso les hablas de Naranjito y seguramente creen que les tomas el pelo. Nunca cantaron "Viva la gente, la hay donde quiera que vas..." y cuando Garcia Marquez gano el Nobel ni siquiera sabían leer. Tenían 7 años cuando la Unión Soviética se desintegró, no se acuerdan del Osito Misha, de la Guerra Fría y conocen una sola Alemania, aunque en el colegio les hayan contado que hubo dos. No tienen edad para acordarse de la explosión del "Challenger", del referéndum de la OTAN, del Bon Jovi de melenas ni de "Ay, quién maneja mi barca?". Para ellos, el sida ha existido toda la vida. No alcanzaron a jugar con el Atari, la bola loca, con recortables, con "los juegos reunidos Geyper". El "CD" entró al mercado cuando no tenían unos años de vida. Nunca tuvieron un toca discos y nunca jugaron al Tente, al MultiHobby ni a la Nancy. Conocen a Espinete sólo de oídas y el nombre de Ángela Channing les suena tan a chino como el de su mayordomo. Muchos de ellos no saben, o no recuerdan, que las teles sólo tenían dos cadenas y más aún, incluso algunos no han visto nunca la carta de ajuste, y no les hablemos de los dos rombos, no nos creerían. No se explican lo que es ver la tele sin un mando a distancia, ni unas Navidades sin turrón de chocolate, y no conciben que en invierno sea imposible comprar un helado. Nacieron siete años después que la Sony sacase el walkman, y para ellos los patines siempre han tenido las ruedas en línea. Y ni hablemos de la normalidad con la que ven un teléfono móvil o un PC. Puede que nunca hayan visto Barrio Sésamo, La Bola de Cristal, D'Artacan y los Tres Mosqueperros o Las Aventuras de Willy Fog, La casa de la Pradera, Los Chiripitiflauticos, Heidy, etc...Nunca se meten a nadar pensando en "Tiburón" y para ellos Michael Jackson siempre ha sido blanco. ¿Cómo van a creer que Travolta bailaba con semajante "look". No aprendieron con el "Libro gordo de PETETE...y no fueron a dormir cantando: "Vamos a la cama..." No recuerdan quién era Mazinger Z, ni Orzowei, Ulises XXI, o que un extraterrestre con cara de lagarto tomara ratones como aperitivo...Creen que Starsky y Hutch son un grupo de música o que los "Ángeles de Charlie" es un estreno cinematográfico(¿Recodáis que nunca conocimos a "CHARLIE") y en su vida vieron "Gente Joven", y nunca sabrán porque las chicas le pedían a "Sandokan" un hijo...
Síntomas de que te estás haciendo viejo:
1. Entiendes el texto anterior y sonríes...
2. Te has quedado sin el descuento del carnet joven.
3. Te acuerdas de las pesetas rubias.
4. En los separadores de la clasificadora no tienes apuntada ni una sola poesía.
5. Tienes medicinas en la mesa de noche.
6. La virginidad hace tiempo que ya no es tema de conversación.
7. Un niño te dice en la calle: "Perdone, "señor", ¿tiene hora?"
8. Necesitas mucho más tiempo que una mañana para recuperarte de una trasnochada.
9. Al acabar de ducharte cuelgas la toalla en su sitio.
10. Te molesta que otro deje la pasta de dientes destapada.
11. Todos tus amigos se casan sin ser de penalti.
12. Cuando ves los partidos y conciertos por la tele, en vez de ir a verlos en vivo.
13. Tus hijos saben más que tú de ordenadores.
14. Vas a la playa y te puedes pasar todo el día sin bañarte.
15. Te puedes gastar 16 euros en un disco sin quedarte pelado el resto del mes.
16. Los dependientes de las tiendas de ropa parecen tus hermanos pequeños.
17. Después de leer este monólogo decides enseñárselo a un amigo, que seguro que le va a encantar...
Enviado por un amigo Baltasar...............y retocado por Mi.

Leyenda del carrer de la má del moro

martes, 25 de noviembre de 2008

"Carrer de la Mà del Moro”,(Calle de la Mano del Moro). Ese es el extraño nombre que reza en la placa de una estrecha callejuela del centro histórico de Palma. Nombre del que la inmensa mayoría de ciudadanos desconocerá su origen. Cuentan las crónicas, que por allá en el año 1730, un cura que vivía en la más completa miseria, llamado Martín Mascort, encontró enterrado en el patio de su casa, un fabuloso tesoro compuesto por cofres de monedas de oro. A partir de entonces, el párroco pudo permitirse el lujo de comprar un esclavo y contratar los servicios de una asistenta. Con el cura vivía María, su sobrina, una joven y hermosa muchacha, que llenaba de felicidad el hogar de Martín. Pero Ahmed, que así se llamaba el esclavo moro, truncó esa felicidad. Enamoró a María y la sedujo, la convenció para que se escapara con el, a lo que accedió la muchacha. La noche de la marcha, Ahmed asesinó a Martín para robarle el tesoro, pero no contaba que sería descubierto por la horrorizada asistenta, quien de inmediato avisó a los soldados que hacían la ronda. El esclavo fue detenido, condenado a morir apaleado, y a serle amputada la mano antes de morir. Como escarmiento público, la mano debía ser expuesta sobre la puerta de la casa del difunto, y allí permaneció más de un siglo, en una urna, por lo menos hasta el año 1841. María, pasó los restos de sus días en un convento, donde murió de arrepentimiento y desolación.

Leyenda del murciélago

miércoles, 19 de noviembre de 2008

En Baleares, a pesar de que está en el escudo de la ciudad de Palma de Mallorca, el murciélago o rata pinyada es un animal que ha sido mirado con antipatía. Dicen que fue maldito por Dios porque se burlaba de Jesucristo. Hay una leyenda que explica la aparición de este animal a raíz de un desafío entre Dios y el demonio para ver quien sabia hacer mejor las cosas tratando de hacer un pájaro. Dios hizo una golondrina y el demonio hizo un murciélago. De sus ruidos hay la locución o frase hecha "renegar como un murciélago" -renegar com una rata-pinyada-" que se dice de aquellas a las personas que reniegan. En la Part forana -fuera de la ciudad- a menudo era objeto de juegos y travesuras por parte de la juventud, como en otras tantas zonas de España.
En las ciudades de Palma de Mallorca, Valencia y Barcelona encontramos un murciélago o rat-penat coronando los escudos de las ciudades. El origen parece venir del siglo XIII, estas ciudades estuvieron muy unidas históricamente durante la reconquista española contra la dominación musulmana. Hay varias leyendas, la más oída trata de la época de Jaime I el Conquistador (1208-1276), rey de Aragón (Cataluña pertenecía a este reino de Aragón). Según la tradición, un murciélago se poso sobre el casco o celada del rey Jaime I durante la reconquista de Valencia, y según las ideas dominantes de aquellos tiempos, este hecho se quiso interpretar como un aviso al rey para que vigilara, desde entonces, fue escogido como símbolo y en 1503 el murciélago se empezó a usar en el escudo de Valencia y se creó también una bandera real en recuerdo de aquel murciélago que se posó en la Celada de Don Jaime I. Otra versión dice que una flecha lanzada contra el monarca en plena batalla dio contra un murciélago que volaba cerca de el y que le salvo la vida, y otra es que un murciélago se posó en la tienda de Jaime I durante la reconquista. (Fuente Barbastella).
Otra leyenda muy extendida es la que recuerda,que un murciélago chocó mientras volaba una noche con un tambor y que con su ruido despertó a las tropas cristinas antes de que fueran atacadas por las huestes árabes en una de las batallas de la conquista de Mallorca,lo que las salvó de la victoria de las tropas invasoras y posibilitó el fin de la dominación musulmana.

El Drac de Na Coca

viernes, 14 de noviembre de 2008


Una de las leyendas más conocidas de la ciudad de Palma es la del Drac (dragón) de na Coca. Se trata de un cocodrilo que vivió en las calles de Palma en el siglo XVII, entre el barrio llamado “del Call” y la Portella. Por increíble que parezca la historia, se cree que el cocodrilo llegó en algún barco siendo una cría y, una vez en la ciudad, se instaló en el laberinto de alcantarillas de la zona. La gente pensaba que era un ser monstruoso. Según testimonios de la época, salia de noche en busca de víctimas con las que alimentarse; gatos y ratas en un principio. Pero el problema empezó cuando su apetito se dirigió hacia los niños que estaban indefensos en sus cunas, o a todo aquél que se aventuraba a pasear por las calles. Según cuenta esta misma leyenda, la bestia murió a manos del capitán y gobernador de Alcúdia Bartomeu Coch cuando se encontraba en la Portella de Palma durante una noche de 1776. El capitán cortejaba a una dama de la zona y mientras dirigía su mirada al balcón de la casa y le dedicaba palabras de amor, entre la oscuridad de la noche y las sombras apareció la mala bestia. Valerosamente el caballero sacó su espada y le quitó la vida, lo arrastró hasta su amada y se lo ofreció en prueba de amor, exclamando: "vet ací es drac, es drac de na Coca" (ahí está el dragón, el dragón de na Coca). A partir de la hazaña del capitán Coch, el drac recibió su nombre actual, con una típica feminización del nombre. El drac fue embalsamado y actualmente podemos encontrarlo en el Museo Diocesano, donde se conserva y puede visitar.

Cancionero: Maria del Mar Bonet - El drac de na Coca
Pel carrer de Sa Portella, quan la nit cau, diuen que hi surt una bèstia; valga'ns Déu, val!S'engoleix les criaturesvalga'ns Déu, val!Les mares de Sa Portellaploren d'espant. Han dit que la naud'un vell mercaderque anava i veniade Mallorca a Alger, va dur d'un viatgeun ou venturer. I va néixer el drac:feroç carnisser. Pel carrer de Sa Portellavalga'ns Déu, val!,les nits fan olor de por,d'algues i sal.Bartomeu Coc, cavaller,jove i galant,diuen que arriba d'Alcúdiaquan la nit cau.De nit ve d'Alcúdia,-galant cavaller-, per veure la dama:rosa de febrer. I allà ha de combatreenmig del carrerfins que en queda trosdel drac carnisser. Pel carrer de Sa Portella,quan l'alba penja,la pluja esborra la sangcolor de menta.

La Mare de Deu Marinera

lunes, 10 de noviembre de 2008

Temps era temps, diu la vella història, que la Verge abandonava de nit la seva quietud i fugia escpada a córrer món pels camins de la mar, com un estel perdut. "L'estel de la mar", li deien sovint els mariners, perqué els donava socors i els treia de perill. Els llibres antics en recolleixen el document escrit, d'aquells prodigis. Les pintures de les presentalles i dels rataulons ho asseguren. També, les velles caçons que la gent ha cantat durant segles en donen relació i en són testimoni:
... a los marines ajuda

i, quan té la mar vençuda,

se'n torna tota remull...

Diu l'antigua crónica que nevegava un vaixell des de Barcelona en direcció a l'illa de Mallorca. La mar es desfermà i les ones s'alçaren. La nau voltava en unamaregassa enfurida, a punt de perdre's, enmig de la tempesta. Els mariners invoraren la Verge de Lluc i prometeren que acudirien a la seva casa en peregrinació, en cas que en sortissin amb vida, del naufragi. De sobte, quan tot just acabaven de fer aquell jurament, un cop de mar els féu prendre l'embocadura del Torrent de Pareis, entre penyalars esquerps. Penetrà tera endins, la nau, fins que la fúria de les ones deixà de castigar-la, en lloc tranquil on la resaga del mar no hí arribava. Saltaren de la nau i enfilaren el camí de Lluc, els marines, amb la intenció de complir la promesa. Caminaren algun temps entre roques, passaren l'Entreforc i arribaren a un bosc d'alzines, frondós, tot de matolls i garriga que esborrava el camí. Caigué la nit i començà a ploure, un ruixat d'aigua i neu. El vent era tan dur i la fosca tan negra que pensaren que potser era pitjor el perill en què es trobaven a terra, que el que havin vençut en la mar furiosa. De sobte, una claror estranya vingué a guiar les seves passes i a donar-los socors fins a la porta de les cases de Lluc. Era quasibé una columna de foc. O, potser, un estel, la cua desfermada, que condüia els pelegrins pels camins de la fosca.
Una altra vegada, això era el quatre de febrer del 1551, un tal Joan Garcia navegava amb altres marines des de Bugia a Barcelona en el Sant Cristòfol, un bergantí avesat a solcar la mar sense impediments. S'alçà la tempesta i les ones s'envalotaren com a cabridelles. Donaren ses vides per perdudas, aquells mariners, fins arribar a creure que l'aigua els serviria de mortalla. La nit era obscura i la neu vingué a cobrir la nau fins al punt que arribà a fer-se dificu`ltòs el maneig de les veles, el moviment dels rems i de les pales. Demanaren favor a la Verge de Lluc i el tingueren totd'una. Per nou vegades els comparegué sobre l'arbre de la nau, entre càntics i glòries. Les aigües s'encalmaren, tan bon punt com la veren. El mar era tot llis. La nau tornava a solcar, generosa la pell de les ones.
També, l'onze d'agost de 1572, donà socors a uns mariners sobre la nau dels quals s'havia desfermat la fúria dels vents. Les vergues de l'arbre havien caigut, destrossades les veles.Arribaren a salvament i donaren gràcies. El vint de desembre de l'any 1575, en qué el patró Baptista es dirigia cap a Génova, li va caure damunt un temporal dins el golf de Lleó. Els navegants donaven les vides per perdudes. Tost plegats cridaven misericòrdia i clamaven auxili. El mar recobrà la quietud i arribaren alegres a port. Una altra vegada, el trenta de gener de 1576, salvà uns mariners d'una borrasca just davant Capdepera, Les ràfegues de vent tombaven la nau. L'aigua s'alçava, impetuosa. El calabruix atupava el pal i les veles, com pedres d'un torrent llançadas a grapades. Caigué la nit. El timoner havia perdut el control del vaixell. La vida d'aquells homes perillava. Clamaren al cel i els vingué l'empar. També donà socors al patró Morató, dia dotze de juny de 1573, prop de Sa Dragonera. Havia partit de Dènia, la mar picada. Més tard, s'encresparen les ones, talment crestes de roca. I el vint-i-dos d'abril de 1579, en què el patró Caselles es trobà enmig d'una tempesta. Un cop de mar els va prendre un home, en Joanot Mascaró. Debades s'enforçaren per rescatar-lo viu, fins que defalliren perquè pensaren ue s'havia ofegat i ja era mort entre les algues. Invocà l'auxili de la Verge, en Mascaró, i la mar es posà plana. Cessà la tempesta i el recobraren viu, aquells que creien que era sepultat sota l'aigua.
Certament, molts han estat els prodigis i la clemència sobre els mariners, en dies de tempesta i maregassa. D'uns se'n guarda memòria, d'altres s'han esborrat del record i romanen en l'oblit. En podriem referir molts d'altres de miracles que parlen de com calmava les veles d'un vaixell, de com donava coratge a un mariner d'un sol rem, de com aguantava el pal major d'una nau que cruixia, ferit pel mestral. D'uns se'n coneix la data precisa, d'altres s'han conservat dins la memòria i la gent encara ara els explica. Naus que venien de Barcelona, de l'illa de Sardenya o de les mars fondes, de les illes gruegues i d'Alexandria. Diu una altra historia que la nit del nint-i-tres d'abril de 1518, quan tothom a la casa de Lluc ja havia partit a retirar-se, devers mitjanit les campanes començaren a repicar totes soles. Els col-legials pensaren que havia succeït qualque cosa de nou i s'aixecaren promptes, amb l'endarrer de saber qui era que feia moure les campanes en aquella hora tan estranya. Quan descobriren que tocaven per elles mateixes, pensaren que hi havia quelcom de meravellós en aquell repicar. Despres veran saber que en la mateixa hora uns mariners, quasi negats, demanaven auxili a Santa Maria. La veu de les campanes havia proclamat el miracle a l'hora en punt.

... a los marines ajuda,

i, quan té la mar vençuda,

se'n torna tota remull...

Bé que ho explica la cançó. Cada matí, abans de l'alba, quan l'escolà acudia a girar la Mare de Déu, trobava que tenia la falda i els peus banyats d'aigua de mar.

La Font Coberta

martes, 4 de noviembre de 2008

L'aigua canta tranquil-la, dins la vall. Corren les fonts pels canalons de pedra. El bestiar acudeix a beure-hi. Quan la calor estreny, els anys de secada, només en resta un fil d'aquella aigua, un rajolí débil. Els ulls de les fonts minven lentament, quan arriba l'estiu, quasi a punt d'extingir-se. El bosc - un boscany d'alzinars i pinedes - abscondeix els secrets de l'aigua subterránia, el misteri obscur de les correnties que cerquen obrir-se pas, fins a la llum.
L'aigua canta, a la vall. A la font del puig Ferrer i a la font Seuca, a la font de la Teula, a la font dels Polls i a la font Freda. També, a la font Coberta i a la font del Guix. de la font Coberta - hom diu que altre temps li deien la font del Pi - en bevia la gent de la Santa Casa i els pelegrins que arribaven pel camí vell. Al recés d'aquella aigua hom trobava una mica de descans per la fatiga, un lloc per a refrescar-se la boca i treure's el cansament del cos.
Un dia, l'amo d'aquelles terres - un tal Miquel Seguí - decidí de tancar la finca amb una bardissa sense portell. La féu alta, per a que nngú passàs i, encara que no s'atreví a talar la canal que conduïa l'aigua de la font al santuari, no va permetre que la cobrissin de pedres per a que no arribàs transparent ni fresca a la taula dels collegials. Sovint, - diuen els papers vells - els porcs hi acudien a beure i a grufar-hi.
El Prior va amonestar-lo moltes vegades. Bé li deia que l'aigua d'aquella font no era seva, que havia de vetlar per a que no l'embrutissin, els porcs, que no podia negar-la als pelegrins que arribaven a Lluc pel camí vell. Adhuc acabà per posar-li un requeriment davant notari, el Prior; car assegurava que posseïa il-legalment la finca, en Seguí, sense titol legitim. Una nit, emperò, l'aigua de la font s'atura de brollar. Debades grataren dins el nient. Ni tan sols en sortí una gota per necessari, de la roca. Aquell mateix vespre, una altra font sorgi - fou un miracle - en la tanca de la vinya, just rant del santuari. Era la mateix aigua, transparent i fresca de la font Coberta, que havia cercat un altre camí, fins a la casa de Nostra Dona Snata Maria. Passat algun temps, el Prior guanyà el plet aquell que havia interposat. Les terres tornaren a esser de la casa de Lluc i l'aigua de la font retornà de bell nou al seu ull antic per on primer eixia.

El Minyó De Subac

martes, 28 de octubre de 2008

-Que mais més a Subac ningú no doni almoina als acaptadors de Lluc. Vull que l'ordre es compleixi: ni una llesca de pa, ni tans sols un glop d'aigua.

La paraula de l'amo és aspra, severa. Havia anat a Lluc i volia que li donassin una cel-la, encara que fossin plenes de gent. Per a l'amo de Subac sempre ha d'haver-hi un lloc al santuari. Per l'amo de Subac els privilegis compten. El prior se'n dol i cerca excusar-se'n, no voldria que s'hi enfadás aquel home. Li diu:

-Em sap greu, emperó no hi ha lloc. No ens queda ni un tros de racó.

-Ni un tros de racó?

-Les cel-les s´n plenes, no tenim ni una cambra per necessari.

-No se'n pot buidar una? La reclama l'amo de Subac.

-Aixó que demanau és excessiu, l'amo.

S'en tornà de Lluc emmoscat, aquell home, i partí a caseva-dins el terme d Sa Pobla-,disposat a pendre revenja. La rancúnia l'inflava. L'ordre fou terminat:

-Que mais més a Subac ningú no doni almoina als acaptadors de Lluc.

Un dia, d'aquells dies, la gent era als sementers a treballar, el nét major va caure dins el pou de l'horta. Havia acudit a jugar-hi amb el germà petit, en Llorenç, i s'enfilà al brocal, i començà a saltar i a fer comèdies sobre la barana. El menut se'l mirava embadalit. Saltava com un pallasso, llavors giscava i omplia de jutipiris la claror lluent de la tarda. El ball no durà gaire. Llenegà , de sobte, i va caue. Un cit d'esglai es va estendre per la fondària del pou, metre durà la caiguda. Va esser un crit molt llarg. Tan llarg com la profundidat del pou, tota de fosca.çQuan el germà petit el va veure que queia, acudí a guaitar-hi. S'enfilà de braó, la panxa aferrada al coll de pedra viva. Encara el va veure per tres vegades que sortia de l'aigua. Llavors, tornava a engolir-se'l aquell mirall de plata, fins que no sortí pus. Debades el cridava:

-Llorenç! Llorenç! dic!

Potser la fosca repetí les últimes síl-labes del seu crit. I partí a córrer desesperat, l'al-lot, a avisar la gent dels sementers.

-En Llorenç ha caigut dins el pou!

No pot trencar alé, de tant de córrer. Les paraules l'ofeguen.

-Què dius?

-Ès dins el pou, mumare, en Llorenç.

-Peró qué dius?

-Ha caigut dins el pou, mentre jugávem.

Abandonaren la feina i partiren totd'una pel camí de l'hort. Debades guaiten. Ningú no ha vist res, dins el mirall. Un misatge s'hi tira, cenyida una corda per la cintura, i treu el cos negat d'en Llorenç tot inflat d'aigua. Ploren. L'mo vell de Subac observa les muntanyes, allá lluny, dins la boira opaca de l'horabaixa. Li promet a la Verge que li donarà els millors fruits de la terra, si assisteix el nét; que retirarà aquella ordre, que sempre, dins caseva hi haurà una mà oberta per a la gent de Lluc. La Verge ha acudit al lloc de la desgràcia. Algú va veure que li donava un alè de vida, aquella Senyora. Sa mare encara el crida:

-Llorenç, respon-me!

Lentament, començà a vomitar l'aigua, el minyó de Subac. Els papers diuen que ressuscità de prompte, que visqué molts d'anys...

El mejor tesoro: LA AMISTAD.

viernes, 17 de octubre de 2008

El billete de 500 euros.
Pablo, con el rostro abatido de pensar, se reúne con su amiga Laura en un bar a tomar un café. Deprimido, descargó en ella sus angustias... que si el trabajo, que si el dinero, que la relación con su pareja, que su vocación!... Todo parecía andar mal en su vida. Laura introdujo la mano en su bolso, sacó un billete de 500 euros y le dijo: “¿Quieres este billete?”
Pablo, un poco confundido al principio, le contestó: “Claro, Laura... son 500 euros, ¿quién no los querría?” Entonces Laura tomó el billete en uno de sus puños y lo arrugó hasta hacerlo una pequeña bola. Mostrando la estrujada pelotita a Pablo, volvió a preguntarle: “Y ahora, ¿lo quieres también?” “Laura, no sé qué pretendes con esto, pero siguen siendo 500 euros. Claro que lo cogeré si me lo das.”
Laura desdobló el arrugado billete, lo tiró al suelo y lo restregó con el pie, levantándolo luego sucio y marcado. “¿Lo sigues queriendo?” “Mira, Laura, sigo sin entender a donde vas, pero es un billete de 500 euros, y mientras no lo rompas, conserva su valor...”
“Pablo, debes saber que aunque a veces algo no salga como quieres, aunque la vida te arrugue o pisotee, sigues siendo tan valioso como siempre lo has sido... Lo que debes preguntarte es cuánto vales en realidad y no lo golpeado que puedas estar en un momento determinado.”
Pablo se quedó mirando a Laura sin atinar con palabra alguna, pero el impacto del mensaje iba calando profundamente en su mente.
Laura puso el arrugado billete a su lado en la mesa y con una sonrisa cómplice agregó: “Toma, guárdalo, para que te acuerdes de esto cuando te sientas mal... pero me debes un billete nuevo de 500 euros para poderlo usar con el próximo amigo que lo necesite.” Le dio un beso en la mejilla y se alejó hacia la puerta.
Pablo volvió a mirar el billete, sonrió, lo guardó y con una renovada energía llamó al camarero para pagar la cuenta...

¿Cuántas veces dudamos de nuestro propio valor, de que realmente merecemos más y que podemos conseguirlo si nos lo proponemos? Claro que no basta con el mero propósito... Se requiere acción y existen muchos caminos.

Trata de contestar a estas preguntas:
1- Nombra las 5 personas más adineradas del mundo.
2- Nombra las 5 últimas ganadoras del concurso Miss Universo.
3- Nombra 5 ganadores del premio Nóbel.
4- Nombra los 5 últimos ganadores del Óscar como mejor actor o actriz.
¿Qué tal? ¿Mal? No te preocupes. Ninguno de nosotros recuerda los titulares de ayer. ¡Los aplausos se van! ¡Los trofeos se empolvan! ¡Los ganadores se olvidan!

Ahora contesta a estas otras:
1- Nombra 3 profesores que te hayan ayudado en tu formación.
2- Nombra 3 amigos que te hayan ayudado en tiempos difíciles.
3- Piensa en alguna persona que te haya hecho sentir algo especial.
4- Nombra 5 personas con las que disfrutes pasar tu tiempo libre.
¿Qué tal? ¿Te fue mejor? Las personas que marcan la diferencia en tu vida no son aquellas con las mejores credenciales, con mucho dinero, o los mejores premios... Son aquellas que se preocupan por ti, que te cuidan, las que de muchas maneras están contigo.
PD: Este escrito me lo ha enviado mi buen amigo"Martin". Moltes Gracies.

La Filosa de la Mare de Déu

domingo, 5 de octubre de 2008

El camí vell de Lluc, com una serpentina que s'allarga entre roques, volteja dins la vall entre pinades. Les muntanyes, clivellades pel degotall de tantes pluges, s'aixequen sobergues. Adesiara, dins la mica de terra d'una encletxa, hi creix un pinotell, un ullastre, potser una alzina venturera. El camí vell de Lluc es revincla pels cingels. Cada indret té un nom: les fondalades i els colls, els penyals i les crestes, les fontanelles i els torrents. Els vells pelegrins coneixen els noms dels llocs per on passaven. Com si fos un rosari, seguien punt per punt totes les llàgrimes que la memòria del poble havia marcat. Els noms passaven d'una boca a les altres:
-Mira: aquella és la penya d'en Pelluc.

-El puig que tenim davant, qualsevol diria que ens vol aturar el pas, és el de n'Escuder.

-I aquella cresta,la del puig de n'Alí.

-Aviat, doncs, veurem el Cavall Bernat.

-El cavall Bernat? Observar'l quasi ran del cami. Hi ha qui li diu la Filosa de la Mare de Déu.

-La Filosa de la Mare de Déu, per què?

-Diuen que la Verge acudeix, de vegades, per aquesta vall a pasturar les ovelles... Mentre el bestiar menja, ella fila.

-Què fila?

-Potser un fil tan llarg com la vida dels homes.

D'hivern, porta una pellissa damunt el gipó per no passar fred i un capell de palma... Mai ningú no l'ha vista, emperó.

-Ningú no l'ha vista? ¿Per què?

-Diuen que en sentir trepig s'amaga tot d'una en una cova del puig de n'Escuder. Tan depressa s'amaga, que deixa la filosa defora del coval. La filosa - cal desfressar-la - es converteix de prompte en un rocam punxagut, tot de flors boscanes.

-I quan la gent ha passat...?

-Torna a sortir, la pastora, i reemprèn la filada de bell nou, mentre les ovelles pasturen per les marjades.

-Però, què fila? Un fil tan llarg com...?

-Un fil de boira tendra, transparent com de vidre, lluminós ¿qui sap? com un somni.

El camí vell de Lluc s'enfila per la muntanya i voreja els abismes. Cada lloc té un nom, cada indret és un punt obert inesperadament a la imaginació.

Felicidades a todos los Rafaeles

lunes, 29 de septiembre de 2008

Celebracion de la Festividad de los Santos Arcangeles

Hoy dia 29 de Septiembre, se celebra la festividad de los Santos Arcangeles, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael. Felicidades a todos.

Los ángeles, mensajeros de Dios. Los grandes arcángeles de Dios testimonian para nosotros la fidelidad y la pasión y celo con que los hijos de Dios han de alabar a su Creador. Ellos, lejos de ser seres desconocidos y “mitológicos” representan los mejores compañeros de viaje, los mejores sanadores del corazón, los mejores defensores de los intereses de Dios en el mundo.

San Miguel es el fiero defensor de Dios. La narración del Apocalipsis nos lo muestra expulsando a satanás de los dominios de Dios, al gran traidor y padre de la mentira que osó rebelarse contra un Dios tan bondadoso. Encendido de celo por el Señor blandió la espada y arrojó a todos los obradores de iniquidad al único lugar en donde pudiesen soportar su soberbia y su rebelión. Por eso san Miguel es en quien el cristiano halla el mejor baluarte para defenderse de las asechanzas demoníacas y gran modelo de fidelidad a Dios. De él hemos de aprender el celo por las cosas de Dios, celo que consume de pasión y que lleva a una acción inmediata, tajante, sobre todo cuando Dios se está viendo ofendido por sus enemigos que incitan sin cesar a la rebelión y desunión.

San Gabriel quizás fue el más afortunado de entre todas las criaturas celestes. A él siempre lo mandaron a dar mensajes. A él le tocó dar el mensaje más hermoso jamás oído a la criatura más hermosa jamás vista. Hablar de él lleva irremediablemente a la contemplación de la Toda Pura, Nuestra Madre de cielo, María. Su ejemplo nos debe enseñar a predicar sin miedos los designios de Dios a nuestros hermanos en la fe y, sobre todo, a testimoniar las maravillas obradas por Dios en Ella. Levantemos confiados la mirada a la Madre y pidamos auxilio al arcángel mensajero para ser fieles a la palabra de Dios en el mundo.

San Rafael representa la mano providente de Dios que no se olvida de sus hijos que sufren en el mundo. A él le tocó sanar muchas heridas del cuerpo y, sobre todo, del alma. Por eso es el arcángel que cura, que alivia las penas del alma, que sabe confortar y comprender al que sufre. De él hemos de aprender a ser un consuelo más que un horrible peso, para el hermano que lo necesita. De él, la confianza inamovible en la acción cierta de Dios en el mundo.De los tres hemos de aprender a saber servir más que ser servidos. Porque los ángeles son ministros de Dios. Y de los tres a estar pendientes de su cierta acción en favor nuestro. ¿Quién sabe si un día cualquiera hemos sido ayudados por un ángel del Señor? No cerremos las puertas a nadie, no sea que se las estemos cerrando a uno de estos mensajeros, o más terriblemente, al mismo Señor de la vida y de la historia.

N'AINA (Petita história d'un amor secret)

domingo, 28 de septiembre de 2008

Les terres de Móssa eren, en aquell temps, d'un senyor moro. Era jove com una espiga tendra, el cor generós, viva la mirada, noble el posat. Comandava sobre la contrada i tenia molts d'esclaus que el servien. N'hi havia una, N'Aina, bella i amatent com un tros de pa, sobre la qual havia posat la confiança. Més d'una sospità que acabaria per casar-se amb ella, tant com l'afavoria. L'observava els matins, quan acuadia al jardí a veure els brolladors, el joc de l'aigua, els peixos del safareig. Un dia, emperò, la notícia d'aquell amor secret arribà a les orelles de la bruixa, una mala dona que vivia en una cova, passats els alzinars de ponent. El cor de la bruixa s'omplí de gelosia i no en pensà de bona. S'enfurinyà totd'una pels budells de la cova i, trobar el doll de l'aigua de Móssa, el desvià cap a l'avenc de Femenia, un fondal esquerp , tan profund com la por.
-Per la fat i fat que la mia mare m'han encomanat: Que l'aigua de Móssa se'n vagi cap a l'avenc de Femenia,_cantà la bruixa_.

I l'aigua va descomparéixer tot d'una. Aquell senyor moro se'n dugué un disgust, de veure com la font s'eixugava. L'hort de les cases aviat va secar-se, començaran a esgrogueir-se el arbres del jardí, el brollador s'aturà de cantar i els peixos del safareig acabaren la vida dins el fang. Un matí de tardor, N'Aina, que havia vist com el senyor de Móssa estava trist i capficat, s'hi acostà temorega. Liva dir:

-Què teniu?

-No ho saps? _va respondre aquell home_. No tenim aigua a Móssa. La mala bruixa ens ha eixugat la font. El bestiar té set i els arbres no resistiran la sequera...

-Si em prometeu la llibertat, tindreu aigua abans d'una setmana.

-Per què te'n vols anar?

-És que enyor la meva gent, sabeu?

-Tindràs la llibertat, si trobas aigua.

Diuen que N'Aina partí a resar a la Verge de Lluc. Picaren al lloc on ella havia marcat i , després d'alguns dies, comparegué un ullal d'aigua fresca, més viva que mai. No en tingué alegria, tanmateix, el senyor de Móssa, perqué pensava que N'Aina voldria partir d'aquelles terres i abandonar la casa, abandonar-lo a ell, trist i malcontent de veure que fugia.

-Per qué no et quedes?

-Si ho feia, la bruixa us tornaria a pendre l'aigua i se l'emportaria a l'avenc, novament.

-Queda't. Perque jo em moriria de mal de tristor, si tu parties.

I dels ulls de N'Aina, en brollà una llàgrima tan viva com l'aigua.

-Queda't. T'ho suplic.

El jardí tornava a verdejar. El brollador cantava i els peixos del safareig resplendien com vidres de colors. Una matinada, la trobaren estesa ran d'aquell safareig, La rosada li cobria la pell de la cara. Els ulls entelats. Els llavis blaus. Acabaren per creure que la mala bruixa havia cercat enverinar-la, encesa de ràbia i gelosia. L'aigua tornà a descomparèixer de les terres de Mòssa. El senyor va plorar-la durant dies i nits. Diuen que va morir d'enyorança, passat algun temps, car no pogué resisitir la mort de l'estimada.

Àngels amb Espases defensen La Santa Casa contra els moros

domingo, 21 de septiembre de 2008

Les costes de l'illa foren en temps passat terres insegures i llosc de malviure. Des de la punta de Formentor a les cales de Sant Telm, des del Cap Blanc als esperons d'Artà, qualsevol indret acabava per ser moratiu, quan la mar era propicia per al desembarc. Aleshores, centenars de moros armats - llops rapissers - posaven el peu sobre l'illa, un cop a Pollença, una altra vegada a Sóller, d'altres a Andratx, a Santanyí, o a S'Allapassa, dins la marina de LLucmajor..., i envestien les cases de les possessions, entraven als pobles i s'emportaven tot quanr trobaven de valor: les joies i el blat, la roba blanca i els animals. Sovint, les persones, jovencells i al-lotes sobretot, que valien bons rescats dins les presons d'Alger. De vegades, la gent fugia esmaperduda, terra endins, només de sentir tocar senyal de moros. D'altres, es refugiaven en les torres de defensa, engaltat el fusell, o es formaven concentracions de tropes. Cadascú hi acudia amb l'arma que tenia més avinent un trabuc, una falç, una forca, un garrot d'ullastre, disposat a defensar el seu pam de terra, el seu tros de casa, la seva particular hisenda.
L'antiga história de les villes de Sa Marina és plena de belles, rústegues, exemplars epopeies casolanes. També, de vells herois revestits de llegenda: homes i dones que el poble ha tingut per valents i ha venerat durant segles pel seu heroisme i la seva coratgia. Tampoc no se n'alliberaren les cases de Lluc de l'envestida dels lladres de mar. Sovint desembarcaven a Sa Calobra, enfilaven el torrent de Pareis i s'amagaven entre les penyes a punt per a afuar-se secretament, quan la gent era al llit. Per tres vegades arribaren al clot d'Albarca, no gaire lluny de la Santa Casa. Tres-cents moros es llançaren sobre les cases de la possessió, el dia de Sant Mateu de l'any 1569 i encátivaren dotze persones. Quan just anaven per agafar un home que havia nom en Pere Martorell, i tenint-se ja per esclau, tant com els altres, en veure que era tan gran l'exèrcit de moros que l'atacava, invocà Nostra Dona Santa Maria i començà a defensar-se només amb mitja llança que tenia, fins que aconseguí saltar una paret i escapar-se sense dany ni ferides del combat. Per Juny de 1663, el dia de Sant Joan el Baptista, després de vespres, quaranta moros es disposaren a envestir la casa de Santa Maria. No hi havia gairebé ningú, en aquela hora, excepte dos col-legials i un criat, car els altres havien acudit al festeig d'unes noces, en una possessió de muntanya. Quan aquells tres homes tingueren notícia que els moros pujaven cap a Lluc, perqué un grapat de dones havien vingut fins aquell punt cercant refugi, es disposaren a tocar les campanes i barraren la porta amb pany y clau. Imploraren l'auxili de Nostra Dona i l'obtingueren. Un d'aquells col-legials guaità per la finestra i va veure dos joves prop del portal que vetllaven l'arribada dels moros. Portaven una espasa dins les mans i anaven vestits amb túniques de seda, transparent i lluminosa. Entraren per la plaça dels LLadoners, els moros. Tot d'una iniciaren la defensa, els joves guardians, esmolada l'espasa i el cor ardit. El combat va ser breu, car recularen tot d'una, aquells lladres, i fugiren depressa, abans que ningú vingués a tallar el camí de la mar. Quan arribà la gent armada, ningú no els va conèixer, aquells dos joves. Tampoc, ningú no va saber per on havien descomparegut, ni qui eren. Volgueren creure que potser eren dos àngels. Dos àngels invictes que el cel havia enviat per a que defensassin la casa de Nostra Dona.

La muerte de un amigo

viernes, 12 de septiembre de 2008

Mucha gente busca refugio en la religión para resolver los problemas de la vida. La religión contiene en su seno muchos elementos que enseñan a vivir en situaciones difíciles. Pero debes creer en ella, y uno no siempre encuentra directrices adecuadas, pues a la promesa de la vida eterna y de la resurrección se añaden el infierno y las penas eternas. No estoy muy seguro de que exista mucha gente que crea de verdad en la resurrección. De cualquier modo, no es mi caso. En cambio, creo que existe mucha gente atormentada por las sanciones, las llamas y los infiernos. La religión es excelente porque ofrece consuelo y respuesta. El problema es… creer. Y, como sabeis, la creencia no es un acto de voluntad. O crees o no. ¿Dónde buscar refugio? ¿Quién sabe cómo se debe vivir? Montaigne afirmaba -con razón- que no sabemos vivir, que al final de nuestra vida poco hemos aprendido de ella y que la tarea más importante es aprender a vivir. ¿Qué debo hacer o qué puedo hacer contra el dolor, el desconsuelo, la desgracia? ¿Tenemos alguna fórmula que nos permita sobrellevar estas situaciones? ¿Cómo podemos buscar una salida a través de nuestras capacidades intelectuales? El Meister Erckhardt, te enseña una senda muy humana para reponerte de tus fragilidades, te dice por ejemplo que mires a tu alrededor y siempre encontrarás ejemplos peores que el tuyo, te dice que no mires lo que pierdes sino lo que todavía puedes hacer, te recomienda conservar el deseo de superar tus límites. Te dice: mira el inmediato presente y no el largo plazo. Ahora si sufrimos nos tomamos una droga, perdemos la identidad o hacemos lo que sea para ocultar nuestra situación, que calificamos de desesperada. En el pensamiento clásico existía una mayor confianza en el hombre y en la capacidad de la razón para afrontar las situaciones difíciles de la vida. Esa sabiduría -sagesse, dirían los franceses- fortalece nuestros espíritus, nos ayuda a aceptar nuestro destino y, además, a continuar buscando respuestas a las cuestiones que no sabemos responder. Acaso será cierto que la filosofía con mayúsculas es la que nos enseña a vivir, mientras que la filosofía con minúsculas es la que practicamos en las facultades?Esta sabiduría está en contradicción con una de las virtudes que todo el mundo me recomienda. La esperanza. Y está en contradicción porque la esperanza, en su sentido genuino, implica ignorancia y también implica que la voluntad del sujeto no puede hacer nada para transformar el mundo, sino simplemente aguardar a que se produzca el efecto beneficioso. Puedo esperar un cambio en mi salud, pero carece de sentido esperar que esta tarde se ponga el sol. Si tuviéramos información completa, la esperanza no tendría lugar. Como decía Spinoza, en su ética sólo hay esperanza si existe temor. La sabiduría vence al temor y destierra la esperanza. Es cierto que la pasión de la esperanza es atractiva, pero comporta el estado del temor, y la sabiduría exige ser menos dependiente de la esperanza. La tarea de vivir es muy complicada, es difícil vivir, muy difícil, porque creemos que dominamos el mundo cuando en realidad, nos parecemos al toro que sale enfurecido a la plaza y cree que dominará el ruedo. La realidad es muy otra, todos sabemos, menos el toro, que acabará entregando su vida. Él actúa como si la muerte no fuera con él, como si la lucha fuera igual, confía en sus fuerzas… es así como los hombres vivimos confundidos hasta que un día se presenta la fragilidad.
Por un buen Amigo, Joaquin Bonnin, fallecido el 11 de septiembre de 2008.

Les Creus D'Enamorança

lunes, 8 de septiembre de 2008

Els camins que condueixen a l'amor són llargs i difícils, plens de boires opaques i d'empinats costers. De vegades, lluminosos i clars, com un arc-en-cel tot de petites, minúscules transparències. L'amor n'és foc abrasador, vida que crema, mirall encès, festa amb campanes. Qui les sent repicar, mai no les deixa. Qui mai no ha sentit la seva remor no sap què és viure. De vegades, et salta dins la sang, l'amor, com una cabra. D'altres, un estel es despenja sobre la cara dels enamorats i els fa tornar pàl-lids. ¿Qui podria explicar-ne el seu gust tan amarg, fins a la mort? És un llarg patiment, angúnies que duren, ferides que s'obrin - ningú sap si es clouran - , peniténcia d'amor, quina ventura!
-És un llarg patiment - , diuen les veus antigues.
Responen les més sàvies:
-Un patiment que persisteix durant dies i hores.
Cada any, cada mes, cada hora, cada punt i cada instant.
Les velles cançons bé que els expliquen, aquets sentiments.
Si no t'alcanç, joveneta, pens que em moriré d'amor: me'n pren com lo ginebró qui mor amb la fulla estreta.
De vegades només és un joc de galanteria, l'amor, un enfilall de metàfores il-lusòries.

Vós sou estrella diana, or del més hermós color; vós sou estrella d'amor capcurucull de magrana.

Potser, la metáfora de dues vides que cerquen conjugar-se en present. ¿qui sabria dir-me on han vingut a caure les ales de la vida?

Una vida, dues vidas, ¿quàntes vides teniu vós? Vós teniu la meva vida i la vida de tots dos.

Un romanç antic explica la historia d'uns presoners que canten. Una dama ha fundat el seu amor en un d'aquells joves. La donzella és filla de l'home que disposa de la vida dels captius i acudeix a son pare per demanar clemència i el perdó del jove. Li confessa que l'estima al presoner:

...el de les calces grogues que té el cabell tan ros - la vida mia - que té el cabell tan ros, la vida mia, la vida amor.

L'endemà, dissabte, els farà penjar a tots, el senyor del castell - ¿que en sap ell de l'amor? - i es tancarà la historia amb corbs que volategen les forques del suplici.
Què en sabia aquell home del misteri que enclou una mirada, un esqueix d'amor en punt de l'alba?
Els camins que condueixen a l'amor són llargs i misteriosos, com un bosc espès tot de penombres. No és fàcil encisar-lo, l'amor. Potser, seria precisa l'aigua de set pous de vena. Qui sabria recitar les paraules de l'encantament? Pels penyals de Lluc, rera l'església, la fadrinalla tenia el costum de deixar aficades dins les encletxes petitas creus d'albó, com a penyora. Diuen que qui deixa una creu en aquell lloc trobarà el seu amor, abans d'un any. És, aquell redós, com un planter de creus esperançades.

El Puig de N'Escuder

viernes, 5 de septiembre de 2008

No feia gaire temps que aquell pastor havia trobat la imatge de Santa Maria, dins el terme de Muntanyes. Un dia en bon matí, tot just acababa la missa primera, el monjo que tenia esment de la parróquia de Sant Pere d'Escorca advertia N'Amet, el pastor moro suara batejat amb el nom de Lluc. Li deia:

- Mira que la conquesta encara no s'és acabada del tot. És cert que el rei en Jaume entrà dins la ciutat fa un grapat d'anys. Queden encara amagats dins les muntanyes escabotells de moros rebels que no accepten l'autoritat reial. Procura tornar prest, amb claror, que la fosca és propícia per les envestides.
Era dijous i havia de partir de cap al mercat d'Inca, el pastoret. Hi acudia a cercar recapte per proveir el rebost. Havia ensellat la bèstia que tenien - un ase clapat - quan el dia començava a clarejar, tot disposant-se a partir sense por. El monjo tornava a prevenir-lo, amb un punt de recel a les paraules:

- El camí és ple de perills, Amet. Ves alesta a la fosca, Hi ha nius de bandolers a les muntanyes que assalten els camins i les possessions. No ensumis gaire les mercaderies, que el temps passa depressa. Reemprèn el camí abans que tombi el sol.

El tirany s'allargava com una cinta per dins la muntanya, entre boscos d'alzines. És quasibé una percinta de seda, el tirany, clapada d'ombres que tremolen i lluentors de vidre. Adesiara s'estreny i salta entre les penyes, tot vorejant el cingle. Quan arribà a Inca, el pastor, acudí al mercat i omplí ben depressa beaces i alforges de bon proveïment. No volia perdre temps amb raons i girà en rodó de cap a Lluc, no fos cosa que la fosca l'aplegàs a mig camí i els lladres cercassin d'envestir-lo en encendre's la nit. Just passat Caimari, quan començava a pujar Sa Costa Llarga, prop d'Es Puig de N'Escuder, li sortiren els moros disposats a robar-li el menjar que portava, decidits de matarlo, si oposava resistència al seu afany de saciar la fam. En veure'ls d'un tros lluny, N'Amet, enfilà una sendera de l'esquerra que conduïa al Puig, entre pedreny i torrenteres. De vegades, caminava ajupit sota el boscam, d'altres, de genollons, cercava sempre de contenir l'ale per a que no el trobassin. Fins que descobrí una cova i s'hi amagà, tot esperant que els moros acabassin per desistir, cansats de cercarlo. Cerca qui cerca, els moros, acabaren per pujar a dalt de tot d'Es Puig. S'acostaren a un serrat que dóna sobre l'entrada de la cova i observaren que sortia la cua de l'ase, d'aquell portal. Pensaren, només de veure la cua de la bèstia, que allà dintre s'hi abscondia N'Amet i que seria bona cosa, amb la idea de sorprendre'l, amollar-se lentament pel serrat en unas alfàbies que havien transportat fins a la cucuia. En fermaren una i hi ficaren un moro. L'alfàbia davallava pausadament. Així i tot, pegava a les roques, de tant en tant; fins que acabà per trencar-se i, tant els tests com el moro, vingueren a caure just davant la porta de l'amagatall. Els de dalt cridaven:

- Que t'has fet mal?

N'Amet invocà la Verge de Lluc. li demanà que no li coneguessin la veu, els moros, i va respondre:

- No me n'he fet. Ja en podeu amollar un altre.

Tornaren amollar una altra alfàbia, i una altra, i una altra... Aviat, tots els moros vingueren a morir davant el coval, estimbats sota les alfàbies esmicolades. N'Amet partí de bell nou de cap a Lluc. Rera seu, deixava just a la falda d'Es Puig de N'Escuder, a la porta de la cova dels tests, un caramull d'alfàbies trencades i un escabotell de moros derrotats.

El nin d'Eivissa

martes, 2 de septiembre de 2008

Els anys passaven i aquell matrimoni no havia tingut encara cap fill. Cada matí, la muller sortia damunt el portal i contemplava el cel de la seva illa, blanc i net com un llançol de fil, amb els ulls una mica cansats. En volia un, d'infant, aquella dona i, potser, _ ho deien les veïnes_ n'hauria fet un de fang, si hagués estat possible. Observava com passaven els dies, com els anys s'escolaven, amb l'endarrer de tenir un fill de ses entranyes.
Un dia _ ningú no diu qui n'hi havia parlat, d'aquella Verge _, acudí al seu empar i invocà la seva protecció. Sabia que eren lluny, les cases de Lluc, d'aquella terra seva, més enllà del mar. Eren lluny, a l'altra banda de la cinta que, tots els matins, seguia amb la mirada, fins a omplir-se l'alè de sal, èbria de llum i de salobre. "Si em veia a esser mare - es deia a si mateixa -, acudiria a veure-la al seu mateix recer, aquesta Verge. Hi aniria peu descalç com una penitent i li oferiria el meu fillet talment una penyora". El marit acceptà la promesa de sa muller i decidí d'acompanyar-la en el peregrinatge, si tenien un fill. No tardaren gaire. Als nou mesos en punt varen ser pare i mare d'un nin com un ramell i atribuïren la gràcia a Nostra Senyora. L'infant creixia, mentre els pares ajornaven un any per l'altre l'acompliment de la seva promesa. Quan va tenir vuit anys, decidiren que no podien deixar passar més temps i resolgueren d'embarcar-se en un xabec, i arribar a Mallorca, i fer el camí de Lluc, el peu descalç, el cor agraït.
La nau traçava esteles de sal sobre el mar. De sobte, el vent començà a moure les aigües i la barca, enduita per força del vent, saltava com una cabrida entre les ones. Aviat els entrà el mareig, als viatgers. Només el nin jugava tranquil sobre coberta, satisfet de veure la mar esvalotada, el combat del xabec en una maregassa increïble i desfeta. Tombà la nau i el nin va caure a l'aigua. Un mariner cridà, talment una gavina enfollida:

- Aturau la barca, que el nin es nega!

Llançaren les cordes que tenien i intentaren de rescatar-lo, amb totes les forces. Acabaren que ningú no sabia qué es feia i el nin es va perdre dins les ones. Bé varen cercar-lo, els marines, fins a posta de sol. Caigué la fosca i tothom ja el donava per perdut entre les algues. El pare parlà de tornar arrera, cap a la seva terra, vers la llum endolada de la seva illa. La mare decidí d'acabar el viatge, d'arribar a Lluc i d'explicar-li a la Verge que ningú en no esser ella podia retornar-lo el fill de ses entranyes, tot just perdut en aquella mar esvalotada i freda. Arribaren al moll de Ciutat. Partiren cap a Lluc. Mai no finia, el camí, i les voltes es multiplicaven com un embull de cintes tenyides d'armargor. Ploraren, dins el temple. De sobte, pel corredor de l'església vella, va comparèixer el fill...
Pensaren que es tractava d'un miratge, d'una visió quimérica que el dolor els presentava sobre el tel de la vista. L'infat saltava davant els seus ulls. Els va estrényer les mans... Preguntà, sa mare:

- A quina corda pogueres aferrar-te? ¿Quin mariner vingué a rescatar el teu cos mig ofegat?

I va respondre el fill:

- Va esser aquella Senyora que em va treure del mar. M'abrigà una flassada i m'eixugà la pell, passada mitjanit.

El Soldat Pelut

jueves, 28 de agosto de 2008

La gent que el va conèixer deia que portava els cabells llargs i la barba espessa, que tenia la cara rugosa i el posat esquiu, gairebé salvatge. Vivia en una cova abrupta i solitària, empenyalada en un espadat de S'Entreforc, que era el seu refugi. Aquell era el seu cau, el jaç d'un fugitiu, la cova del soldat pelut. Des d'aquell forat, hom diu que saltava pel rost del rocam i pels cingles, talment una llebre. Com una cabra de muntanya que enfila un tirany entre les roques i aferra les peüngles a les pedres, a la rel d'un ullastre, al matoll ressec d'una carritxera, l'home pelut s'arrapava al cairell dels penya-segats i saltava entre els còdols con una salvatgina.
Ningu mai no l'havia encontrat, l'home pelut, pels paratges aquells. Ni un pastor, ni un carboner, ni un pescador... Tampoc ell no havia vist cap criatura humana d'ençà que havia fugit de la vida dels homes, talment un escàpol. El Rei havia cridat la seva quinta. Les crides obligaven els joves a partir a la guerra, lluny de la villa, més enllà del mar. "És feréstega, la guerra", havia pensat. "Els canons em fan por, - repetia en silenci -. La mort escampa el seu vel de cendra sobre els camps de batalla, perquè el foc dels fusells és dur com la pedra d'un llamp". Havia decidit fugir d'amagat i refugiar-se en un lloc esquerp. Cercava menjar: animals que caçava a pedrades i herbes que collia prop de les fontanelles. Lentament, la pell li tornava groixuda i aspra, el pèl li creixia, fins que arribà a cobrir-li tota la pell. Una vegada, el trobaren uns pastors i l'envestiren disposats a matar-lo a garrotades, perquè mai no n'havien vist cap d'ésser tan estrany com aquell. El soldat pelut els semblava una bèstia, un ésser monstruós i lleig, potser un dimoni, tal vegada l'últim descendent d'una raça perduda, una estranya fera... S'hi llançaren a sobre, els pastors. Els garrots fiblaven sobre el cos del soldat. Els volia explicar que no era un dimoni i cercava de trobar les paraules precises. Començà a cantar-los els Crec-en-un-Dèu, per a que entenguessin que era un cristià i acabassin de pegar-li com a una feristela.
D'altres vegadas, la gent que habitava aquelles contrades, els homes de les possessions a les quals acudia el soldat a robar aviram,i ous, i fruita, organitzà més d'una batuda per veure si el caçaven. Diuen que l'arribaren a agafar, un horabaixa, prop de Son Colom. El fermaren a un arbre i decidiren de fer una becaina, tan cansats com estaven, després de l'encalç. Mentre dormien, aquell home havia aconseguit desfer els nusos de les cordes i escapolar-se dels fermalls. Llavors, havia tornat a fugir, muntanya enllà, i havia cercat un enfony, lluny dels perseguidors. I tornà a sentir-se lliure novament.
Sobre el final de le seva vida, la gent en dóna explicacions diverses. N'hi ha que diuen que acabaren per capturar-lo, tanmateix, al final d'una d'aquelles escomeses. El tornaren a fermar i en feren negoci, de le seva estampa, selvàtica i agresta. El portaven a les fires, de mercat en mercat, amb la intenció d'exhibir-lo. La gent se'l mirava embadalida, espantada de veure un home tan estrany, gairebé una bèstia ferotge i peluda.
D'altres expliquen que el descobriren que robava cireres en una d'aquelles possessions. L'amo agafà l'escopeta i disparà un tir. Caigué mort, el soldat. Diuen que agafaren el seu cos i el llançaren en un barranc, més enlla de les roques, entre el pedreny esquerp i els matolls.

L'era D'escorca

domingo, 24 de agosto de 2008

Diuen per cosa certa que en un lloc que avui hi ha un fondal cobert de romeguers hi hagué antany una era. El punt és pedregós i pla, entre marjades, no gaire lluny de la vella parróquia de Sant Pere d'Escorca. Potser d'estiu, hi bufa un alè de vent, quan el sol crema com una caliuera. Més enllà, l'espessor del bosc, una fontana i la remor transparent de les alzines, al caire d'un coster tot de garriga. Sobre aquella era, un dia de festa de guardar - diuen que era diumenge - hi havia uns pagesos que batien el blat. Havien fet l'estesa en bon matí. Ara, les mules trotavan sota el sol roent. Una veu s'alçava, ronca, com si tingués aresta, plena de cadències:

Muletes correu, correu,

fareu sa palla menuda:

si la feis llarga i torçuda

en s'hivern l'hi trobareu.

Suava el bestiar, la boca bavosa, i suaven els homes. La pols havia vingut a mesclar-se amb la suarda. De vegades, les mules aturaven el trot i continuaven, lentes, la batuda, el pas cansat, feixuga la mirada. Llavors, fiblaven les flastomies i els renecs s'alçaven:

Vatua el món, dic!

Mal et toc un llamp!

Què esperes a córrer?, mala bèstia?

La verga doblegava cinglades sobre l'esquena de les mules. Damunt la pell banyada, dibuixava ratlles de dolor, la verga. Les bèsties reprenien la carrera i tornaven a encendre's les cançons. Els carretons començaven a voltar de bell nou i esgranaven les espigues. La jornada durava de sol a sol. Passat migdia, havien començat a ventar, les forques en l'aire. S'alça la palla com una polseguera. El blat serà retent i tot són rialles. Algú no s'atura de flastomar, perqué la feina és llarga i el sol ha començat a tombar dins els avencs.
De sobte, la dringadissa d'una campana anuncià que pasava un capellà amb el Sagrament. Portava el combregar a un malalt, no gaire lluny, perventura a un pastor moribund o a un carboner. Ni pel viàtic no pararen de fer feina, aquells homes. La campana tocava, vibrant. Damunt l'era, tot eren rialles i crits. S'aturà el sacerdot i encara en feren befa, els que batien. Llavors, s'obrí un clot - talment un avenc - i l'era s'esfondrà. L'avenc s'engolí els homes i les bèsties, els carretons i el blat. Dins la negror de la boca, homes i bèsties vingueren a colar-hi la vida, aquella tarda.
L'estrèpit ressonà entre les pedres. El gemec de les mules s'ajuntà a l'esglai de la gent. El viàtic continuà el seu camí, solitari, cap a la casa del moribund que l'havia enviat a cercar. Només una dona - diu l'antiga memòria - que seia en una roca prop de l'era, salvà la vida, perquè venerà el Sagrement, mentre passava.
L'avenc, encara ara, tot de pedreny i romeguers, fa por, de nit. La gent que en passa assegura, en silenci: -És un clot maleït. Abans va esser una era...
I hi ha qui ha sentit remors estranyes, cançons feréstegues que vénen de l'infern, animals que troten, carretons que volten, entre l'entranya de les penyes, homes que criden, condemnats per sempre a batre entre les roques.

El Bandejat

viernes, 15 de agosto de 2008

Eren plens de perill tots els camins, ni un tirany no restava, tan sols, lliure i segur. La gent no s'atravia a moure's de caseva i barraven la porta, totd'una que la fosca començava a extendre's com un vel de dol sobre les teuladas. Qui havia de circular per necessitat ho havia de fer amb l'arma dins les mans, la bossa dels diners ben amagada i el cor estret, engrunat per la por. Ben pocs se n'escapaven de les seves ungles. Inesperadament, en Mateu Roig els queia damunt com un fibló, els prenia les unces d'or i els deixava fermats. El carruatge prosseguia la seva ruta i arribava al poble lentament, com un aucell ferit. Mai no tingué temps ningú d'engaltar-se un trabuc i fer-li front. L'emboscada era ràpida com un llampec i, si algú ho intentava, en Mateu Roig el copolava a tirs. Més d'una vegada obrí el ventrell d'un home a cops de ganivet. La seva urpa era dura, esmolada i ferotge. Quan els carrors tornaven de Ciutat era l'hora propicia per a l'envestida. Llavors, els pagesos portaven la bossa plena de diners: tot quant havien guanyat amb els negocis, el que havien cobrat de les mercanderies... Cap camí, emperò, no era segur. Debades, podia imaginar quisvulla encarar-se amb aquell home. Ai, del qui tingués pretencions de safalcar-lo! Desgraciat d'aquell que gosàs alçar una mà. Nomes que mogués un parpell, en Roig, els seus homes es llançaven a combatre talment un esquadró de feres enfurides, els claus afinats, les urpes de ferro. Mai ningú no li havia posat la mà damunt. La gent deia:

-Té follet, aquest home.

-En Roig té follet, una estranya virtut que li permet escapar-se dels seus perseguidors.

-Quina habilitat per fugir del perill...!

-És quasi un dimoni.

-Fàcilment pots trobar-lo en llocs distants, gairebé a la mateixa hora.

-Se'n riu de la justícia.

-No hi ha més lleis que les que ell imposa.

Tenia fama d'escapar-se sempre dels qui l'encalçaven. Aquella habilitat per fugir era atribuïda a una capsa de plata que duia penjada pel coll. Una capsa que el feia invulnerable als guardians de l'ordre. De vegades, els homes de la justícia organitzaven l'exploració d'una contrada. La ràtzia arribava als indrets més esquerps i a les coves. Sovint, les presons de Ciutat s'omplien fàcilment de lladres de camí, després d'una batuda. Mai no l'aplegaren. Potser, l'encobria, la gent; uns per temor, d'altres per gratitud; perquè tenia fama de donar socors als qui no posseïen res, amb el producte del seu robatori; per això l'ocultaven, perquè sabien que no suportava la misèria. Per això el perseguien, els guardians.

-Te follet, aquest home.

-Tanmateix, mai no l'agafaren, mentre dugui penjada la capsa de plata.

-És amic del dimoni...

La plaça de Lluc bull de festa i sarau, la nit de la revetlla. Els festers crepiten i omplen de clarors trèmules la rotllana. Els balladors salten, les al.lotes es fan pregar una estona, abans de sortir. La mùsica insinua el joc, l'aire del ball. Hi ha una jove que no accepta cap de les propostes. Bé la insisteix, la jovenalla. És bella i galana com un tany de murtra, el cabell negre, la cara pál.lida. Duu la falda de seda amb flors repujades, el gipó ajustat, el volant de randa... Arriben tres homes. Baixen dels cavalls i es presenten al ball. N'hi ha un que porta una capsa de plata penjada pel coll. La gent diu, amb veu baixa:

-És En Mateu Roig.

-Què dius?

-Dic que és En Roget, aquell de la capsa.

-I tu qué saps?

-Et dic que és En Mateu Roig.

-Els homes de la justícia fa temps que el cerquen.

-És En Roget, ben cert que ho és.

-Diuen que donarien moltes lliures d'or a qui l'entregàs, viu o mort.

-Té follet, aquest home.

Es va estendre un calfred sobre les cares. Tothom callava. El bandejat es dirigí a aquella jove i sol.licità qué e acceptàs de ballar amb ell, la nit de la revetlla. L'al.lota volgué posar-li una condició: que li donàs l'amulet, el tindria dins la mà mentre duràs el ball. El bandoler dubtà, abans de despenjar-se'l. Finalment, li entregà la capsa de plata. De sobte, l'envestiren quatre homes. El dominaren amb facilitat, sense l'amulet. Els companyons fugiren escapats. Debades esperonejava, En Roget. Ningú no li ajudà, tanmateix. Cobert de sang i pols el traginaren en un carretó de porcs cap a Ciutat. Allí el penjaren. Ningú no sap si el ball continuá, aquella nit, a la plaça de Lluc. Els papers no diuen si la jove va guardar la capsa de plata per recordança.

El Salt de la Bella Dona

miércoles, 13 de agosto de 2008

El camí és aspre, de pujades abruptes y de difícil pas. De vegades, és quasibé un trirany entre penyes, el camí, tot de perills i fondalades. Cap a Lluc s'encamina una parella. Són home i dona. El marit calla. Porta un capot negre sobre les espatlles. Està trist i esmús, com si estàs disgustat. No diu paraula. Ella duu un vestit de seda blava i un mocador de color de cirera. Dins les mans, un pom de flors blanques; són roses de garlanda. Partiren a Lluc abans de pondre's el sol, quan cau l'horabaixa. El dia mor i la fosca obscureix la mirada de l'home. Té el cor ple de tenebres, el marit. Les últimes clarors han vingut a filtrar-se entre les branques. Està trist, capficat. Per això decidiren de partir. Un niu de serps li rosega l'entranya, tot un infern de gelosia. Havia sospitat sovint de la muller. Les llengües... -ai, les llengües!- l'havien mormolada entre dents: - Diuen que un carboner eixerit i despert la vetlla, nit i dia. -Hi ha un pastor que toca per a ella aires d'amor, les vetlles en què lluna creix. Un dia li explicà que la pretenia, el pastor. Ella va respondre, amb la cara vermella d'empegueïment: -Tu bé ho saps que sóc casada. La sang li pujava al cap, al marit. El dubte l'atordeix. No n'hi ha d'herbes, que curin d'aquest mal. La fosca torna espessa. Passa una òliba com un mal averany. És just un pedaç de llana, l'òliba, desdenyosa i feixuga. Dobleguen el cim d'un pujol i el rost s'empina. L'aigua remoreja dins el barranc. El torrent bramula, entre les roques. D'alt d'Es Grau, el camí passa al caire de l'abisme, pel costat d'una penya tallada a plom. Les aigües corren dins el fondal obscur. Entre els remors de l'aigua, hom hi sent encara ara gemecs i plors. La carn s'esborrona, només de veure la fosca del cingle.

-Donau-me la mà, marit. Les cames em tremolen.

-Mirau la fondària.

-Per què n'heu de tenir?

-L'aigua corre allà abaix, entre el pedreny. No sentiu una veu que gemega?

Va respondre aquell home, cegat de ràbia:

-Hi tiraren una dona, una nit fosca com aquesta.

-Per què?

-Deien que engayava l'espòs.

-L'enganyava?

-Vós tindreu la mateixa mort, que també m'heu traït en secret.

Ella guaitava sobre l'espadat, quan ell l'agafà per les cames i la tirà a l'abisme. Rodolà pel barranc rebotant i donant tombs, aquella dona. Tingué temps de cridar:

-Mare de Déu, assistiu-me!

Com una roca que cau rost avall, es precipità vers la profunda negror de l'avenc. Un silenci de pedra retallà la mirada d'aquell home. Observà de primcompte la fosca del barranc: ni un gemec, ni l'eco d'un esglai, ni la remor trèmula de les alzines. Decidí que era morta i partí escapat, depressa, sense esma, la vista emboirada, pels camins de la nit. Travessà les garrigues i les torrenteres, el boscany i l'arbreda... És fosca clara. La nit ha començat a diluïr-se i pinta de penombres els fondals i les cares. Les campanes de Lluc toquen missa primera. Rera les muntanyes, ha començat a encendre's el dia talment una magrana. Quan arriba al temple, aquell home, la claror de la llàntia illumina un rostre conegut. La cara es trasmuda, els ulls li espiregen. És la muller pròpia que està agenollada, sense una ferida, ni un trenc, ni la pell gens blava, ni cap moradura... Els àngels de Lluc somriuen de veure l'esclator de ràbia del marit gelós. La dama, somnàmbula, canta lletanies i esfulla les roses blanques de garlanda.

Las leyendas de las tierras de Lluc

lunes, 11 de agosto de 2008

Durante siglos, los mallorquines han narrado, subiendo las tierras altas, estas leyendas. Son bellas epopeyas rurales, crónicas de la vida del pueblo sobre las cuales la imaginación colectiva han ido colocando un punto de poesía. La poesía que se desprende del paisaje, porque la imaginación de los hombres y las mujeres ha buscado expresarse con la Natura y ha sabido extraer de la tierra una palabra épica capaz de emocionarnos por la vida poética de la historia. He creído que un pueblo que no tiene leyendas para contar, es un pueblo condenado a morir de frió. Mala vida le espera a la gente que ha perdido la capacidad de percibir la poesía de las viejas parábolas, de recontar de nuevo los sueños de siempre, de volver a recrear dentro de la memoria las viejas y antiguas sombras colectivas. Son, estas, las viejas historias que los peregrinos contaban por los alrededores de Lluc.

Leyendas :

La Trobada. El salt de la bella dona. El bandejat. L'era d'Escorca. El soldat pelut. El nin d'ivissa. El puig de N'Escuder. Les creus d'enamorança. Angels amb espases defensen la Santa Casa contra els moros. N'Aina (petita historia d'un amor secret). La filosa de la Mare de Deu. El minyo de Subac. La font Coberta. La Mare de Deu Marinera.

Extraído: Publicacions del Santuari de Lluc (1984)-Les llegendes de les terres de Lluc
Texto de Gabriel Janer Manila. Ilustraciones de Joan Guerra.

LA TROBADA.

La vall és apacible, poblada d'arbres i fecunda d'aigües transparents. És tot un bosc, la vall, d'alzinars i pinedes. Una vall inmensa en lloc d'aspres muntanyes. La garrida s'escampa pels faldars de la serra i cobreix els tossals d'arboceres i ullastres, de mates de llentiscle, de romaní i de murtreres. De nit, sembla una negra fondalada, la vall. És terra d'aigües: d'albe-llons i fontanelles, de fonts que solquen el terreny i fan créixer l'arbreda: la font Coberta, la font del Puig Ferrer, la font Seuca, la font dels Polls... L'aigua canta, tot l'any, ran de les fontinyolas. Quan tomba l'hivern i el sol s'encabrita, s'obrin les flors boscanes i la garriga s'omple d'aromes suaus i de colors lluents: groc i vermell, blanc de neu i morat. El rústec morat les veròniques. Cada vespre, un pastor acudeix a aquell lloc. Mentre les ovelles pasturen pels sementers i les marjadas, les nits clares d'estiu, en Lluc observa els estels i juga a descompondre les constel lacions. Coneix Ses Cabrelles i la Vera Creu, persegueix amb la vista l'estel dels Pastors i s'agrada de fer volar el pensament i les idees per la vida lluminosa de Sant Jaume. Potser, algunas nits, acompanya amb el flaviol les remors de l'aigua. Llavors, s'edormisca una estona i, en trencar l'alba, acudeix a rentar-se la cara al nient de d'una font, a espolsar-se el sobec amb quatre grapades. És fill de pares moros, el pastor, tot just batejat, sotmesa l'illa pel Rei en Jaume.Una d'aquelles nits, era dissabte, en LLuc va veure una gran claredat. Havia portat la guarda al racó d'en Malonda i, des d'aquell punt, observà que per una encletxa de les roques sortia una calor brillant com d'argent viu. Perventura, un estel havia vingut a caure entre el pedreny. Potser era la lluna que s'havia amagat rera les carritxeres. El cel era fosc. les roques espirejaven com un fester. En Lluc s'hi acostà, lentament, la mirada absorta en la contemplació d'aquell prodigi: la música suau, l'harmonia dels instruments de corda, les veus primfilades dels àngels... Tot s'esvai. Replegà la guarda i partí cap a Escorca, el pastor. Tots els dissabtes, quan el cel s'enfosquia, tornava a comparèixer aquella llum i aquells càntics. Dins la profunda negror de la vall, entre les ombres, es repetia la visió misteriosa: la claror nítida, la música i els cantiris.Un dia, acudí a explicar-ho a un monjo que feia vida solitària a l'església de Sant Pere d'Escorca. Era de la regla de Sant Bernat, el monjo. No acabava de creure'l. Hi acudiren tots dos, el dissabte següent, quan el sol tombava i la nit omplia les muntanyes de foscors incertes. Pel camí, encara li contava les meravelles que havia contemplat amb els seus ulls. Encara eren lluny i ja entrellucaren la claredat que el pastor havia vist. Pensaren que s'hi abscondia un tresor, entre el penyals esquerps; un tresor increïble cobert d'herbei i romeguers. S'hi acostaren. En una encletxa de la roca, tapada de terra i embolicada amb un drap verdosenc, hi trobaren una figura de la Verge, el fill als braços, quasi somrient, la cara morena, el ropatge sembrat de lliris d'or, un llibre dins les mans de l'infant que marca el principi i la fi de totes les coses. L'adoraren, el pastor i el monjo. Ploraren; diu l'antiga història que d'alegria. Llavors, donaren avís a la Ciutat i acudiren al lloc de la trobada -enmig d'aspres muntanyes- els Marnífics Jurats i el Capítol de canonges de la Seu acompanyats de moltes persones. Honoraren la imatge, la juraren per patrona d'aquest Regne i li contruïren un oratori. Quant la gent de l'illa va assabentar-se del prodigi, hi pujaren estols de pelegrins. Uns clamaven que s'acabàs la fam, d'altres la gerra, d'altres la pesta... La Reigna del bosc i de les aigües continuava marcant el principi i la fi del cel i de la terra.

La cancion de Gollum

jueves, 7 de agosto de 2008


Como ahora me ha dado por investigar las influencias de Tolkien en la musica contemporanea, y bien habeis visto han aparecido unos cuantos grupos interesantes, y los que quedan, tambien he encontrado letras de canciones, mi ingles es un poco pobre, por lo cual no les habia prestado atencion, esta que os voy ha poner es exquisita al ver su traduccion.
Con Gollum’s Song ocurre, como con tantas otras cosas, que o te encanta o no la soportas. Ese aire oscuro y la voz quebrada de la Torrini no son del gusto de todo el mundo. De hecho, es la única de las tres canciones de la trilogía que no ha sido nominada al Oscar.
Música de Howard Shore . Letra de Frances Walsh, Janet Roddick, David Donaldson, Steve Roche y David Long 2002 Duración: 5.51 (versión BSO)
La cancion de Gollum (de la pelicula "Las dos torres")
Donde hubo luz, cae la oscuridad.
Donde hubo amor, no queda amor.
No digas adiós. No digas que no me esforcé.
Estas lágrimas que derramamos
caen como una lluvia
por todas vuestras mentiras,
el dolor, la culpa.
Y esperaremos hasta quedarnos completamente a solas.
Estamos perdidos, jamás volveremos a casa.
Así que finalmente seré lo que he de ser.
Nunca he tenido un amigo fiel.
Ahora decimos adiós, decimos que no te esforzaste.
Estas lágrimas que derramas llegan demasiado tarde.
¡Retira las mentiras, el dolor, la culpa!
Y lloraras cuando encares el fin solo.
Estás perdido, nunca regresarás a casa.
Estás perdido, nunca regresarás a casa.