lunes, 14 de abril de 2008

La muerte está tan segura de alcanzarte, que te deja una vida de ventaja.
Anónimo

Bella Muerte



Hoy he visto a la muerte y me ha dicho que pronto nos reuniremos. Que está deseando tenerme a su lado, que se siente muy sola yendo de un lado a otro llevándose almas que, al fin y al cabo, no son para ella.Pero conmigo es distinto, quiere que le siga en sus viajes, que sea su discípulo en la eternidad. Que sea su compañero, amigo e hijo, y que aprenda todo lo que pueda para algún día ocupar su lugar. No es fea y fría como piensan algunos, se nota que no la han conocido. Todo lo contrario, es cálida y dulce como el buen vino, lo único frío en ella es su mirada, como de hielo, pero incluso el hielo llega a quemar cuando lo tocas sin guantes. Es la más bella que he visto nunca, tiene una belleza sepulcral, pero belleza al fin y al cabo. Al conocerla se ha despertado en mi un gran interrogante,¿por qué le tienen miedo? No lo entiendo, desde que la he visto sólo pienso en el momento de reunirnos y unirme a ella en ese cálido abrazo que me dará la eternidad. Gracias a ella seguiré siendo joven por siempre. Qué tiene eso de malo? Es lo mejor que podría pasarme en estos momentos de eterna angustia que llevo sufriendo desde hace años. Por fin se acabará la tristeza sin explicación, la angustia absurda presente todo el día, a todas horas. Y cuando hayan pasado las décadas, los siglos, los milenios, yo seguiré aquí, sabiendo todo de todo , de todos. Habré visto cómo la humanidad se ha destruido a sí misma, como hace con las demás cosas. Toda la tierra será un país tercermundista sumido en la miseria y el caos. Para entonces ella morirá en mis manos y yo ocuparé su lugar, crearé mi propio reino, no dejaré que las almas vayan a una u otra dirección, sólo se quedarán conmigo. Y lo harán voluntariamente, porque para entonces la vida será tan muerte que se enamorarán de mí y preferirán mi mundo.