Mi corazón estaba roto, la persona que amaba no estaba conmigo, se que yo había cometido tanto errores, pero no tenia el derecho de irse, así, sin avisar, sin siquiera darme una explicación del por que de su partida, odie, aborrecí, pero pensé que era su decisión. Muchas cosas pasaban por mi cabeza, preguntas como ¿Qué hice mal?, ¿Por qué se ha ido?, ¿Se fue por otra persona? No entendía, no quería entender. Sentía una soledad extrema, por que yo amaba con toda mi alma, pero solo se perdió en la nada, que pretendía, darme todo su amor y de repente quitármelo, por que lo hacia, por que era tan cruel, por que todo es así me preguntaba constantemente.Pero un día sin mas ni mas, extrañaba tanto que no podía quitarme de la cabeza el ir a buscar, así que tome mi abrigo, las llaves de mi coche y me fui sin rumbo y sin dirección alguna. Estaba lloviendo, la visibilidad era nula, no podía conducir, estaba tan desorientada que mi corazón se detenía por momentos. Con mucho trabajo llegue a la colina mas alta de la ciudad, en ella había un mirador donde se veía toda la urbe.Saque una botella de tequila, y me puse a beber, recordando, amando, muriéndome por dentro. Estaba tan ebria que casi no recuerdo como salí de aquella colina, iba caminando toda desorientada cuando escuche una voz que se me hacia muy familiar, mire a todos lados, pero no la lograba localizar, a pesar de la lluvia seguí caminando y me di cuenta que la voz provenía de lo mas alto del mirador, como pude regrese, cuando estaba subiendo los escalones, mire una silueta oscura, camine hacia ella y le pregunte quien era, para que me llamaba. No contesto, pero me señalo a la ciudad. No entendía nada, pero me acerque a la orilla para visualizar lo que señalaba aquella silueta. Al llegar a la orilla, sentí como mi cuerpo se deslizaba por el aire, como mis manos y pies flotaban, era una sensación agradable, estaba volando. La sensación era extraordinaria, me sentía por primera vez libre de cualquier problema, volaba y eso era lo único que importaba, me decía a mi misma, esto no puede estar pasando, de seguro me alcoholice demasiado y me volví loca, pero no, estaba volando, y era mas que real, pero llegue al suelo. A más de cuarenta metros de donde estaba. Había caído y había muerto al instante. Desperté y mire a todos lados, y la silueta estaba ahí, pero ya no llovía y ahora si veía quien era. Me acerque a ella y le dije-Eres tu verdad.-Si, perdóname por irme antes de tiempo.-Pero nuestros padres no querían que estuviéramos juntos y para mi fue la única solución.-Si ahora lo entiendo.-Ahora estaremos por siempre.-Si, hasta la eternidad.-Te amo Marcela.-Y yo a ti Julia.-Ahora estaremos juntas y nada ni nadie nos podrá separar.
Hace 6 años
